"Los Querubines de Cordoba" (Crónicas diferentes)

  Probablemente sea una de las noticias más trágicas que nos puedan dar, después de casi un año de incertidumbre, sufrimiento y pena, de gran parte de la ciudadania de este País. Particularmente de una madre y familiares...

Qué por un error imperdonable de la Policía Científica, cuando declaró que los restos óseos hallados, pertenecían a pequeños animales. Cuando la realidad, se trataban de los restos del pequeño José, dos años y, su hermana Ruth de seis. (Esperamos responsabilidades de la Policía Científica).

Restos encontrados en la finca familiar "Las Quemadillas" ¿descendientes del demonio, vaya nombre?. Donde un alma enferma, José Bretón, padre de los niños, incineró, mejor dicho, preparó un crematorio para deshacerse de las criaturas y borrar cualquier prueba.

¿Y los niños? ¿Ha merced de un sicópata descerebrado de odio y venganza, maltratador y cobarde
 machista, que no pudiendo soportar la separación del mal trato al cual sometía a su mujer, acabó con los niños?.

Afortunadamente poco a poco el sufrimiento será cuestión de tiempo, aunque muy difícil según dícen. El tiempo hará el olvido, la resolución del caso ayudará a mitigar el dolor y, yo ¡sueño!.

Contactando con mis amigos del "Valle del Aroma Azul", me trasmiten que Ruth y José se encuentran muy bien, que se están acomodando perfectamente. Y que la llegada al "Valle" fue apoteósica. Los Querubines Celestiales con sus trompetas, les hicieron uno de los más sonados recibimientos...

Donde un tal Tarsicio, que en su día fue lapidado por los romanos, hizo de introductor, ya que también habla el castellano aunque con acento andaluz. Aprendido de unos gitanillos que murieron electrocutados, cuando robaban chatarra para poder comer ellos y sus hermanos.

Tarsicio al ser uno de los niños más mayores es uno de los responsables, disfruta viendo la felicidad de los chavales, donde la mayor parte del año es tiempo de verano. Y los arboles frutales repletos de sus frutos rodean toda ésa camaradería de niños llegados de todos los rincones del mundo, que aunque escandalosos, son felices de encontrarse juntos, sobretodo cuando chapucean en el lago de agua dulce que predomina dentro del "Valle".

Qué se encuentran muy felices Ruth y José cada día que pasan en el "Valle del Aroma Azul", que le dicen a su mama amarla mucho. Que mire a las estrellas todos los dias, ellos habitan en una de ellas, pero que no sabrán decir cual de ellas se trata, dada la magnitud que contempla el Universo.
 
Que se despiden porqué todos los días llegan nuevos niños y deben recibirles como se merecen. También nos dan las gracias por todo lo que los hemos querido. Y nos mandan muchos besos, muchisimos, a su mama y, familiares sobretodo.  Luis