Internet

El dominio de Internet es un gran problema, mejor dicho, un gran handicap para personas que a ciertas edades con la evolución de la comunicación si no seguimos este nuevo ritmo nos dejarán postrados, rezagados y lo que aún pueda ser mas frustrante, desconectados de esta nueva realidad virtual tan de nuestros días.

Este escrito quisiera fuese un punto de reflexión de principio y aprendizaje, de cómo y porqué debiera ser de rigurosa obligación por parte de nuestras instituciones el tutelarnos, es decir, comprometerse a que periódicamente y de forma continuada e indefinida todo aquél que quiera estar al día tenga suficientemente material didáctico, así como lugar y profesorado donde pueda cumplir sus pretensiones aprovechando este momento histórico de crisis, paro y recesión.

Hace escasamente pocos días el Gobierno ha aprobado un presupuesto de diez mil millones de euros, lo cual imaginamos se repartirán entre las respectivas Comunidades, dinero íntegro para esta nueva tecnología de la que coincidimos totalmente y, deseo fervientemente tomen buena nota las respectivas administraciones competentes, para que en momentos tan duros resurjamos de las cenizas como el Ave Fénix, logrando mas conocimientos si cabe y estar a la altura de esta nueva maravilla de la información, democrática y comunicante como es Internet.

Quizás pueda parecer pretenciosa ésta petición. Al contrario, sabemos y de hecho personalmente sigo acudiendo asiduamente a estos cursillos, pero el motivo no es otro, que cómo me descuide, el siguiente cursillo ya estará adjudicado a otras personas, dada la demanda y sobretodo la gran aceptación que tienen. ¡Esta es la razón! considero, que no hay suficiente profesorado y posiblemente nos encontremos en unos baremos mínimos en un asunto tan importante como puedan ser las nuevas tecnología y la educación virtual.

Por tanto, invito a quien corresponda y agradecer sinceramente tales iniciativas ya que son el espíritu de las ciudades. Aprovechando para dar las gracias a tanto profesorado competentísimo como hay, así como a todo ese personal de las Casas de Cultura que tanto nos ayudan, con esa seriedad y abnegación cuando tantas veces interrumpimos sus quehaceres para que nos expliquen o nos muestren tal o cual programa que, asombrados a ciertas edades y que con Internet empezamos a descubrir. Luis

( Publicado en Noticias de Gipuzcoa y Diario Vasco el mes de Abril )